30/8/10

SAY MY NAME!

Andar por la vida con un nombre diferente, extraño, raro o feo no es fácil.Créanme, lo digo por experiencia.

Soy el tercero en una generación de Aurelianos y en un par de meses llegará el IV. Mi hijo también se llamará Aureliano. La decisión está tomada y les cuento que ha sido apoyada por muchos y muy cuestionada por muchos más. Agradezco las opiniones, todas importantes. Afortunadamente para los papás,el tema del nombre de los hijos no es democrático, es más bien una dictadura. Asi pues, Aureliano será.

Creo firmemente que el nombre influye en el desarrollo de la personalidad. Llamarse Aureliano en segundo de secundaria puede ser una complicación. Si iba a una fiesta, todo salía de maravilla hasta que la niña con la que estaba bailando me preguntaba el nombre: "¿¿Aure que??"...Aureliano..."¿¿Laureano??..Nop, Aureliano .."¿¿Emiliano??". Nop...Aureliano..mira, te dejo el numero de mi otorrinolaringólogo y gracias por bailar conmigo. Fin de la conversación.

Como esta situación no podia sostenerse mucho tiempo, habia que pasar el dificil trago de decir el nombre poco común desarrollando otros aspectos de la personalidad. Así pues, cuando me preguntaban mi nombre, siempre respondia la verdad,acompañado de un par de ventajas competitivas: "Me llamo Aureliano, me sé muy buenos chistes y toco la guitarra en las fiestas". Es broma, pero lo que si es cierto es que le fui agarrando cariño al nombre. Como todos.

Y es que el nombre nos acompaña de por vida. Dice un cliché que la palabra mas dulce para los oidos de cualquier persona es su nombre. Llámese Aureliano, Lamberta o Eustaquio. A todos nos gusta oir nuestro nombre. Se dice también que en una reunión llena de gente hablando, somos capaces de escuchar nuestro nombre siendo mencionado al otro lado del salón. Así de selectivo es nuestro cerebro cuando llegamos al tema de nuestro propio nombre.

Y todo esto viene porque el fin de semana estuve en una tienda (Es un club de compras muy socorrido que antes se llamaba Price) y al llegar a la caja, ví que una señorita tomaba mi credencial y apuntaba el número de cliente para luego salir corriendo frenéticamente a verificar algo. Yo sé que lo que hacen es revisar el monto total de compras de la membresía en cuestión durante el año, para luego venir a ofrecer "magníficos" descuentos al adquirir una membresia tipo Oro o VIP o alguna ridiculez parecida. Yo quería safarme del tema porque no estoy interesado, pero no pude. Son rápidos, debo reconocerlo.

La señorita se acerca a mi y me pregunta: ¿AURELIO Garcia? ...(Mil flashbacks de la secundaria pasaron por mi mente). Le contesté. NO, no soy yo. Se le cayó la cara y me dice..¿"mmm, seguro?..¿habré tomado alguna otra membresía?. Le dije: Si, seguro. Yo no soy AURELIO García. Y ella replicó con cara de enojo: "Pero aqui dice!!! Aurelio García". Sin ganas de prolongar más esta estéril discusión le dije: Señorita, lea bien.Yo me llamo Aureliano Garcia y le juro que no conozco al Aurelio ese del que ud. me habla. Finalmente ella me dice con cara de triunfo "¿Vé? Yo sabia que era Aurelio, Aureliano...o algo por el estilo". O ALGO POR EL ESTILO. Aun no se cuantas veces respiré profundo para responderle: "Señorita, acaba usted de perder la venta por omitir el detalle más importante a la hora de realizar cualquier negocio y eso es APRENDERSE EL NOMBRE DEL CLIENTE". Se me quedó viendo, su supervisor estaba enseguida, el me vió, se encogió de hombros y se la llevó. Momento muy incómodo. Para ellos.

Parece increible, pero esto pasa todos los dias en todas las industrias. Hace ya varios años tuve la oportunidad de trabajar en una agencia automotriz. Los vendedores me pasaban a sus clientes para que yo cerrara la operación con ellos. 6 de cada 10 vendedores no sabía su nombre.Ya lo habían enamorado de un auto, pero no sabian como se llamaba. Recuerdo que me preguntaban..."¿Como te fué con "El Inge"?..¿Ya quedó lista la operación?... Y yo les decía "¿Cuál Inge?" ..."Pues el Ingeee..el bigotón, el que siempre trae botas vaqueras" ...Y yo: "¿Como se llama??"... "Pues ..pues... ¡¡¡EL INGEEEE!!!".

Absurdo, ¿verdad?. Pero así pasaba. Y les aseguro que sigue pasando. No es muy dificil entender por que muchos clientes no regresan. No escucharon lo que querían oir: Una buena propuesta personalizada con Su nombre.

En el mundo de las ventas, conocer a nuestros clientes es esencial para sobrevivir. Tener un inventario de conocimiento del cliente es tan básico como tener luz o PC en la oficina. Pero sobre todo, mostrar un interés genuino en las personas que hacen negocios con nosotros es un factor que define el éxito o el fracaso empresarial.

Un nombre encierra una vida completa. No importa si es bonito o feo, de moda o anticuado, impronunciable o simplemente alegórico y silvestre. Cada nombre tiene un dueño y este dueño lo cuidará celosamente. La primer muestra de respeto es aprenderlo y pronunciarlo correctamente. Si tenemos dudas, se vale preguntar: "Señorita, solo para verificar que lo tengo bien..¿Su nombre es Antonomasia o Ana Tomasa?. Preguntar siempre nos evitará dolorosas confusiones.

Toma solo un par de minutos aprender y recordar un nombre. Hay miles de técnicas de asociación para que el nombre no se nos olvide.Hacer el esfuerzo vale la pena al 1000%. Nos redituará en mejores relaciones, mas clientes y sobre todo, más ventas y negocios sostenibles en el largo plazo.

Con todo respeto...Say my name! ...sólamente, dilo bien.

Do Something!

Aureliano García

4 comentarios:

Ari dijo...

Pues a mi me gusta mucho tu nombre, me recuerda Cien Años de Soledad...

No hay nada peor que ser latino/hispano y llamarse Kevin LOPEZ o Britany MENDEZ :S

Aureliano García dijo...

Hola Ari,

Muchas gracias por pasar. Y si, 100 años de soledad está plagado de Aurelianos y Jose Arcadios. nos hizo buena pubblicidad el Gabo.

Saludos!!

Aureliano

Yazmin dijo...

Uy te entiendo perfecto , también es una lata estar diciendo como se escribe, desde que recuerdo tengo que decir: Yazmin con Y y z y no falta el que escribe jazmyn , es una lata.. a ver como le va a nuestro Areliano, lo bueno es que tiene buen maestro.

Besos

Yaz.

Anónimo dijo...

Muy satisfactoria lectura de este post... Sufro del mismo mal... Y para colmo la combinación de la palabra japonesa con mis rasgos mexicanos.... pues no son de gran ayuda... Pero ni hablar!
Y para colmo, soy super friolenta y mi nombre significa NIEVE... en fin!...jaja

Saludos,
Oyuky