¡Y no se hablan unos con otros!
En mi opinión, leer es el privilegio máximo que tenemos los seres humanos. El momento que le dedicamos a la lectura es mágico, es un momento en el cual podemos interactuar con el ser y sentir de nuestros escritores favoritos, de los que no queremos tanto e incluso, de los que no conocemos y se nos presentan formalmente cuando tenemos en las manos alguno de sus libros.
Siempre he creído que una buena profesión es la de escritor, ya que son de los pocos seres humanos que en realidad alcanzan la inmortalidad. No importa si dejaron este acalorado mundo hace un día o hace 200 años: ellos reviven cada vez que alguien decide abrir uno de sus libros y los deja salir en forma de pensamientos e ideas expresados en letras.
Así pues, leer nos convierte en cómplices íntimos de los escritores. También nos puede convertir en sus detractores, en enemigos jurados (le pasó al amigo Salman Rushdie con sus famosos "versos satánicos", ¿recuerdan?...el Ayatolla Hassan Sanei lo amenazó de muerte por su herejía al escribir dicho libro y ofreció una recompensa de 2.8 millones de dólares por su cabeza, definitivamente este es un fan poco apreciado por el escritor). Lo que sí es un hecho, es que los libros, como los amigos o enemigos, despiertan en nosotros una enorme cantidad de sentimientos y pensamientos que nos hacen crecer como personas y abren nuestra mente a nuevas ideas y formas de pensar.
Yo creo que en la literatura, la belleza está en el ojo del que la admira o, en este caso, en el ojo del que la lee. Es importante ir formando un criterio leyendo los clásicos y empezar a experimentar con diferentes géneros, hasta que vayamos encontrándole sabor a la lectura y sepamos identificar los estilos que más nos gustan, los autores que nos hacen pensar y nos entretienen, los títulos que captan nuestra atención y, por supuesto, nuestras librerías favoritas. No importa cual sea el resultado de nuestro gusto final en términos literarios, la cosa es empezar a leer y crear el hábito hasta que se convierta en una parte fundamental de nuestra vida. Un complemento necesario y esperado: El momento de leer un buen libro.
México es un país con pobres hábitos de lectura (estoy seguro que eso explica las noticias que vemos a diario en los periódicos referentes a violencia, drogas y la existencia de algunos políticos). Se dice que el mexicano promedio lee 1 libro y medio al año, ya incluyendo los libros de texto que son obligatorios en las escuelas. Para muchísima gente, leer es un castigo. He escuchado muchas veces comentarios como éstos cuando pregunto a alguien su opinión sobre algún libro: "Me voy a esperar a que hagan la película", "¿sabes si lo tienen en audiolibro?", "¡es que no tiene dibujitos!",entre otras linduras. Y ¿como no?, si en la mayoría de los sistemas educativos en México se le da a la lectura el concepto de "obligación", no de hobbie, convicción o escape a la cultura y a una mejor calidad de vida.
Es tiempo de que entendamos que leer el "Hola", la "TV y Novelas" o la "Quien" es muy divertido y no niego que de vez en cuando me las aviento con singular alegría. Pero no podemos decir que somos un pueblo que lee, solo porque sabemos quien es la nueva novia de Luis Miguel o como se llama el cuarto hijo del principe de Brutolandia. Y siento decirles que el Libro Vaquero, Sensacional de Traileros y el Libro Gordo de Condorito, por más interesantes que sean....no son una buen tema de conversación. Hay que diferenciar.
Pero no se vale culpar 100% a las escuelas o al gentilicio por nuestros malos hábitos de lectura. Nadie nace condenado a la ignorancia a menos que se condene uno mismo. Leer solo toma un paso y es ir a la librería o biblioteca más cercana, escoger un libro y abrir la mente junto con la portada del ejemplar seleccionado para dejarse llevar. Y si hay niños en la casa, aparte de tener pañales y biberones, empecemos a formar una biblioteca que puedan consultar cuando empiecen a tener edad de leer. Yo recuerdo que mis padres tenían un librero con muchos y diversos libros que mi papá compraba para que nos interesaramos en la lectura. Había de todo, desde "Don Quijote" de Miguel de Cervantes hasta "Archipielago Gulag" de Alexander Solzhenitsyn. Ahí nació mi enamoramiento con las letras y con los libros. Un amor que perdura hasta el día de hoy.
Fué en este librero donde descubrí a García Márquez, quien se convirtió en mi autor favorito, sobre todo por la gran cantidad de Aurelianos que creó para 100 Años de Soledad; al leerlo me dí cuenta que no era yo el único con nombre raro y que, ¿por qué no?, era un nombre para premio Nobel (jajaja). Su colección completa de libros es simplemente, una joya. (Y por favor, ya no masacren sus libros haciéndolos películas, es una infamia)
Yo cuento a mis libros en mi lista de amigos. Creo que tengo más amigos encuadernados que de carne y hueso, y ¿saben?...no está tan mal. Los libros SIEMPRE estan ahí por mí, por nosotros; no se impacientan y cuando decidimos abrirlos, asi hayan estado cerrados por meses o años, no están sentidos con nosotros y no reclaman la ausencia. Siempre que abrimos un libro, hay algo de sabiduría que se nos queda y podemos decir que, como seres humanos, somos unos antes de abrir el libro y, al cerrarlo, ya hemos mejorado aunque sea un poquito, porque ya leímos, ya crecimos.
Nos enamoramos de los personajes, nos imaginamos los lugares que ahí se describen, nos hacemos partícipes de las historias que leemos, odiamos a los villanos, amamos a los héroes. Subrayamos lo que nos llega al corazón y lo leemos, muchos años después, y nos damos cuenta que la sensación de asombro o de admiración por lo que ahí leímos sigue intacta. No concibo un viaje sin un libro ni mi vida sin poder leer. Todos mis libros estan rayados, marcados, subrayados. Y es que yo soy de la idea que un libro sin anotaciones del lector, esta vacío. No hubo diálogo. No nos llegó al alma.
Muchos buenos momentos los he pasado con un buen libro en mis manos. ¿A quién no le ha pasado el quedarse sin dormir con un ejemplar que nos atrapó desde la primer página y no podemos parar de leer hasta terminarlo?. ¿Quién no se ha emocionado con una línea magistralmente escrita?. ¿Quién no se ha carcajeado con las ocurrencias de personajes que nos cautivan, a quienes asociamos a veces hasta con nuestros amigos y conocidos?.
Hoy, escribo para un selecto grupo de amigos: estoicos y valientes; mágicos y llenos de significados, secretos e historias; amigos leales, amigos de verdad. Hoy escribo para mis amigos entrañables: los libros.
Aureliano García
4 comentarios:
Es verdad no podemos hechar la culpa a nadie mas al comienzo del año compre en amazon los libros que leeria durante el 2009 y aun no voy a la mitad, muchas veces cambio el libro por la tele??
Lo mejor abrir un libro despues de tiempo y leer una linea subrayada que en su momento hizo sentido.
Back to the books!!
Woow..!! impresionante articulo y dicho que todo depente de cada uno de nosotros si lees, ves tv, o simplemente pierdes el tiempo en cosas vanales.
Gracias por todo en especial por publicar este tipo de articulos que tanto nos ayudan a crecer y que nos motiva. Ahh!! lo entre a tu blog gracias a Patricio Peker y ganaropciones.com
Aurelio, tengo una sugerencia muy personal espero que sea de tu agrado.
Mire todo el blog en general esta OK. pero veo que es muy pesado o sea no carga rapido al ingresar a tu blog.
Seria bueno que en la entrada solo lo pongas 5 entradas(o articulos) asi tu blog de cargaria rapido.
Un abrazo,
Eloy Romero L.
http://triunfaya.com/blog
Hola Eloy,
Gracias por tus comentarios!...Tomare en cuenta la rcomendación, me parece buena idea ya que es cierto, aveces tarda en cargarse la pagina y seguramente es por que carga todo de una sola vez. Te mando un abrazo y pondre tu blog en mi lista de recomendados.
saludos
aureliano
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