Doce uvas en una copa. 12 segundos para la media noche. Empieza la cuenta regresiva y sabemos que vivimos los últimos 12 segundos del año que estamos por terminar. Y como si las uvas fueran una especie de borrador mágico, las comemos pidiendo por cada una de ellas, un deseo; cada uva nos da la oportunidad de hacer borrón y cuenta nueva y volvemos a hacer promesas para ser mejores personas, amigos, esposos,empresarios,en fin, mejores seres humanos. Hacemos propósitos para el próximo año que empezará en el preciso momento en el que nos comamos la última uva. (ACLARACION IMPORTANTE: como no quiero cargar con nadie en mi conciencia, si no se quieren morir ahogados, empiecen a comerse las uvas faltando un minuto para las 12, porque una por segundo aumenta nuestra posibilidad de morir atragantados y esa no es buena manera de empezar el año. Usé los 12 segundos solo para fines literarios jajaja).
Este ritual de las uvas, aunque es muy simbólico y muy recordado por todos, en realidad es una de las formas más adornadas que tenemos de mentirnos a nosotros mismos sobre lo que haremos arrancando el nuevo año. Está comprobado: los deseos de año nuevo prácticamente se extinguen antes de Junio y el 90% de la gente no se acuerda que propósitos hizo. Y es que la verdad, si ya mero llega otra vez diciembre, pues es mejor esperar y que vuelvan las uvitas!.
Somos humanos, no hay nada malo en esto. Y antes de que me ametrallen los lectores más intensos, quiero dejar muy claro el hecho de que por supuesto reconozco que HAY excepciones y seguramente todos conocemos gente que en realidad dejó de fumar, bajó 20 kilos, se le quitó lo grosera, conoció al amor de su vida o fue delegado en Iztapalapa al menos por unos dias (no puedo dejar de imaginarme a Juanito, atragantado con la uva del poder allá por Diciembre del 2008 y diciendo: "Yo me hago político, así sea con banda tricolor en la cabeza, total ya se robar y soy ignorante, ¡voy de gane!)
Con toda seriedad, vaya desde aqui mi aprecio y felicitación a los que cumplen al 100% sus deseos de año nuevo y viven para contarlo.
Mi experiencia es más bien mixta. Algunas cosas las he deseado con pasión y las he perseguido hasta terminarlas exitosamente. Algunas otras son terriblemente duras y difíciles y las retomo y vuelvo a botar de forma intermitente durante todo el año (Dicese Gimnasio y bajarle a los berrinches...on and off).
Y como el 2010 no es solamente inicio de año sino inicio de DECADA!, mi idea es hacerme la vida fácil. Es por ésto que hoy les comparto mi lista de 10 Desprópositos de año nuevo. Si todo sale como espero, terminaré sin cumplir ninguno y todo me saldrá al revés. Si así sucede ( Y la estadística muestra que asi será) ésto será MUY bueno para mi y mis seres queridos.
Ahí les van:
10 DESPROPOSITOS AURELIANESCOS PARA LA NUEVA DÉCADA
1) Engordar 10 kgs
2) No leer ningun libro
3) No ganarle a Yaz en el Wii
4) No viajar por el mundo
5) No escribir en el blog
6) No aprender a tocar piano
7) Terminar en ultimo lugar en la carrera corporativa
8) No ire al Gym ni jugar tennis.
9) Odiaré a mi prójimo y a mi planeta
10) Seré muy pero muy Infeliz.
Ahi están. Los he dicho. Y en este mundo al revés, la formula debe funcionar. Que así sea.
Es mi ultimo post de este año. Me gusta terminarlo tal y como lo empecé: escribiendo. Pero sobre todo, me gusta terminarlo con muchos más lectores que hace 12 meses. Gracias a todos por pasar, por comentar, por debatir y por concordar. Todo cuenta y en verdad aprecio que le dediquen dos minutos de su dia a leer mis locuras. Para mí, el recibir visitas y comentarios tiene un gran valor y espero seguir contando con su lectura en el 2010... (¿o no?).
Hasta yo mismo me confundo, no es difícil ya que mi cabeza, evidentemente, no funciona bien. Pero espero haber pasado el mensaje. Y ahora si, en serio, que el dia de mañana empiece para ustedes la mejor década que hayan vivido en toda su historia. Solo es cuestión de hacerse el Despropósito.
Feliz 2010!
Aureliano García