19/6/09

A 2 DE 3 CAIDAS...SIN LIMITE DE TIEMPO!


"La arena estaba de bote en bote, la gente loca de la emoción....y en el ring luchaban los 4 rudos....IDOLOS de la afición....EL SANTO, EL CAVERNARIO, BLUE DEMON Y EL BULLDOG!"
Finalmente, y después de pasar muchas veces por el mexicanísimo ritual de posponer las cosas o de "decir que sí, pero no decir cuando", le pusimos fecha y el martes pasado, puntualmente, arribamos a la famosa ARENA COLISEO de Monterrey.

Fue en este popular coso, donde nos esperaba una noche llena de mitos, de personajes, de historia, de catársis popular y de una representación cultural al mas puro estilo barroco de un México exótico, apoteósico, pero sobre todo, lleno de magia y digno de un cuadro de Picasso ( y creo que un Picasso se vería mas o menos normal, en comparación con el espectáculo que se forja en esa arena). Fue una noche en la Lucha Libre.

La mercadotecnia jugó un papel importante para que decidieramos dedicarle una noche de nuestra vida a las luchas. Y es que la empresa tiene en su cartelera semanal, lo que se denomina el "Martes Nice"...Y no es que uno sea muy nice ni mucho menos, pero el mensaje nos hace pensar que esa noche no tendrás que aguantar que te avienten el "agua de riñón" o que le falten al respeto a tu pareja....porque, supuestamente, va pura gente "bien". Pues bien...PURA MERCADOTECNIA.

La estrategia es de segmentación de precio, y para que se den cuenta, este martes "nice" el boleto mas caro y VIP de toda la arena cuesta 150 pesos ($12 dlls aproximadamente). Entonces, de "nice" no tiene nada y ¡Que bueno!. La idea de la lucha no solo es ver el show que se lleva acabo sobre el ring, sino vivir y ser parte de la locura colectiva que se desata en las gradas. Y para estar en las luchas, uno debe despojarse de lo nice y colocarse lo "guerrero", lo "loco" y sacar a punta de gritos, chistes y manoteos, todo el stress, las frustraciones y los rencores que se acumulan en el trajín diario.

El espectaculo empieza con un par de luchas " De relleno", con luchadores novatos, flacos y muy jóvenes. Se nota que están empezando, sin embargo utilizan nombres que aspiran a ser mas: "Pedro Navajas", "el Mongol Chino", "El hijo del Ninja", "Casanova", "Pancho Tequila". Luego vienen las luchas con equipos de 3 vs 3. Y finalmente, la lucha estelar, con gladiadores que demuestran con creces el por qué estan en la funcion principal. Las máscaras, las capas, los tatuajes, las botas, las mallas son solo algunos de los aditamentos que hacen a cada luchador un heroe único, un enigma y un ícono de la cultura Kitch que en México es religión y en paises como Japón, se ha convertido en tema de culto.

Los luchadores son en sí, un show aparte. ¿Como termina alguien luchando sobre el ring?....no lo sé, pero son auténticos héroes, los niños los persiguen para sacarse la foto con ellos, para pedirles autógrafos. Finalmente, a ellos es a quien vamos a ver, porque el luchador representa al mexicano que puede ser héroe, que puede atraer masas, que defiende, que pelea, que es un ganador. La máscara o la cabellera, son dentro de la lucha, los máximos trofeos a los que se puede aspirar. En México, "El Santo" o "Blue Demon" son nuestros "Supermanes" autóctonos y nos preciamos de tenerlos como parte de nuestra cultura popular.

Hay 3 partes que encontre por demás divertidas: Los árbitros o referees, el papel crucial que juega el público dentro de la locura del espectáculo y la división que existe entre los dos bandos que existen en la lucha: "los Rudos" y los "Técnicos".

Los árbitros son los únicos que conocen las reglas y pueden estar cargados hacia el lado de los rudos o de los técnicos, total, nadie les puede reclamar. Ayudan descaradamente a sus luchadores favoritos y se meten de lleno con el público que, por lo menos, les recuerda a su santa y bomba madre cada vez que pueden. Evidentemente, estos señores son de teflón, todo se les resbala y hasta se regodean en sus ataques frontales a los luchadores que les caen mal, asi como a la barra del público que les grita toda clase de improperios sin lograr nunca ofenderlos.

El público, se va transformando desde la primera hasta la ultima lucha (el efecto cerveza también juega un papel importante aqui) y empieza a involucrarse en el espectáculo, llegando a formar parte del mismo, apoyando a su bando favorito y despotricando a grito abierto contra el equipo contrario. Hubo un señor que llevaba su propio megáfono, con el cual gritaba improperios a los luchadores, asegurandose que TODOS lo oyeramos fuerte y claro. La ocurrencia del mexicano es vasta y hay que estar atento a todos los chistes y gritos que el público expresa. En algunos de ellos hay perlas de sabiduria, en otros, simple desahogo. Ser parte del evento y participar activamente en el, interactuando de manera casi catársica, es una experiencia inolvidable.

Los bandos, Rudos y Técnicos, son tambien dos muestras de la eterna lucha entre el bien y el mal. La injusticia contra la verdad. Lo blanco y lo negro. Es un toque básico de la lucha libre, pelear por ideales. Yo, personalmente, apoyo a los Rudos. Creo que toman literalmente la palabra "libre" y son agresivos y sagaces. Los técnicos me parecen un poco ñoños, no rompen una sola regla y permiten ser vejados por los rudos a cada rato. Pero eso si, rudos o técnicos, no hay un solo luchador que no sea un gran acróbata. La técnica para caer, para pegar, para brincar desde la tercera cuerda requiere de práctica y entrenamiento. Los que dicen que la lucha es puro teatro, pues estan invitados a subirse a un ring y aguantar que les caiga una masa de mas de 130 kilos en plena cabeza, volando desde una esquina del ring. Si eso es puro teatro, pues que obra tan interesante las que nos tocará ver.

Así pues, el martes nice se convirtió en un escaparate a un nuevo mundo que definitivamente cautiva y emociona. El grupo de amigos que asistimos, terminamos con máscaras, subidos en el ring, trepados en las cuerdas, divirtiéndonos como locos y sintiendo, aunque sea por un momento, la emoción de ser heroes enmascarados, esperando luchar a 2 de 3 caidas , sin limite de tiempo.

Creo que finalmente, todos somos luchadores y todos luchamos manera libre. Para el común de los mortales, el coliseo es la vida diaria y podemos ser rudos o técnicos, y apostar la máscara o la cabellera todos los dias. La lucha libre es, por ende, una representación de la realidad que exacerba nuestros sentidos y nos hace sentir parte de un mundo alterno donde podemos ser un personaje que reta a nuestro alter ego y que saca la parte heroica y ganadora de cada uno de nosotros.


Que vivan los RUDOS!


Feliz fin de semana

Aureliano "Dark Demon" García

4 comentarios:

k.marcela dijo...

que rudo eh! jaja... ntc, que padre, lo mejor fueron las fotos, hasta me la creiiii!...
nunca he ido ahora quiero ir a ver si es cierto jiji.. happy weekend, happy you are here guys.
tq.
ch

Yazmin dijo...

A mi lo que mas me impresionó fué como se pueden cargar unos a otros como si no pesaran nada, echar un montón de maromas como si fueran resortes, aguantar esas caidas y levantarse a seguir luchando...

Estuvo divertidísimo y ver a todos esos niños como locos admirando a sus luchadores favoritos fue lo máximo...

Vale la pena ir aunque sea un a vez.

TAR

un beso

Yaz.

goyoalvarez dijo...

que hay aure como estas , espero que bien. te esc pqe me acuerdo de las luchas pero que nos dabamos cuando estabamos chicos pqe nos dabamos hasta por los codos y quien sabe quien era el rudo y el tecnico pero no la pasabamos bien y como olvidar en mazatlan que nos peliamos por el cangrejo.
bueno me da gusto saludarte
saludos goyo

Aureliano García dijo...

Goyo,
que gusto saber de ti! Espero que todo vaya muy bien por alla. Claro qeu recuerdo las peleas, sobre odo la del cangrejo y la del carrito jajajaj..y creo que ambos eramos rudos de corazon jajajaj...
te mando un abrazo mi hermano, que estes muy bien!
aure